lunes, 17 de marzo de 2014

Higuaín destrozó todo el planteamiento de Ventura en el 90'

Giampiero Ventura sorprendió a todo el mundo con una alineación muy inesperada: dejó sentados a sus dos grandes estrellas, Immobile y Cerci, y se habla de un posible toque de atención a los dos internacionales italianos para que espabilen, ya que el equipo llevaba tres partidos perdiendo y sin marcar ni un solo gol en ninguno de ellos. En su lugar, entraron dos delanteros que no han gozado de mucho protagonismo esta temporada con el equipo granata, Barreto y Meggiorini. Los dos jugadores, que no son puntas puros, se colocarían como referencias en el ataque del conjunto local.

Alineaciones del partido (sharemytactics.com)


Este tema fue el que creó más discusión en la alineación que presentó el experimentado entrenador italiano, pero no fue la única novedad en el once. El Toro salió con un teórico 3-5-2, pero que se transformó en un 5-3-2 durante gran parte del encuentro. Lo que pretendió Ventura con esta variación tan defensiva fue vigilar los peligrosos ataques del Napoli. La clave de esta línea de 5 fue el doble lateral que se impuso en los dos costados. Los carrileros del partido fueron Darmian y Maksimovic, dos jugadores de carácter muy conservador, sobre todo el serbio, que apareció por la banda derecha y formó junto a Bovo, el central por esa banda, para tapar a Mertens y las llegadas desde segunda línea de Ghoulam
  
Así consiguieron anular la ofensiva partenopea, que no encontró a sus mejores jugadores en ningún momento. El juego de los dirigidos por Rafa Benítez fue demasiado horizontal y sin mucho peligrodebido a la buena presión en un centro del campo también muy poblado por el Torino y el gran trabajo de sacrificio que hizo El Kaddouri en la mediapunta. Así transcurrió toda la primera parte: el Toro saliendo a la contra liderado por el marroquí y Kurtic -que no estuvo demasiado acertado-, mientras que Tachtsidis se quedó cubriéndoles la espalda, y el Napoli intentando salir jugando, aunque el no tener unos centrales muy adecuados para esto y la falta de espacios en el mediocentro propiciaron la falta de verticalidad y la desaparición de sus jugadores de ataque. Solo hace falta decir que Callejón no apareció, que Higuaín no tocó ni una pelota durante la primera parte y que los dos delanteros granatas no tuvieron nada de protagonismo. Que los mejores de la primera mitad fueran Fede Fernández para el Napoli y Glik para el Torino dice mucho del partido. Esto lo resume todo.

Los movimientos del Torino durante el partido. En defensa bajan los carrileros y suben
en ataque. En las contras, salen los interiores y se queda Tachtsidis y sin balón se presiona
a la salida de los centrocampistas napolitanos.



Durante los segundos 45 minutos, Ventura decidió acabar con el pequeño “castigo” que impuso a Immobile y a Cerci y decidió que salieran a calentar. Al ver el cambio tan cerca, tanto Barreto como Meggiorini se pusieron las pilas y tuvieron la mejor oportunidad del partido hasta el momento, pero eso no sirvió de nada, y primero el brasileño y después el italiano salieron en detrimento de Ciro y Alessio respectivamente. Así, se colocó Immobile como única referencia y Cerci por banda derecha, mientras que Darmian se permitía subir por la izquierda solo cuando el trabajo defensivo le dejaba. Los dos equipos acabaron el partido de la misma manera que lo habían empezado. Al Torino ya le iba bien ese empate, aunque ahora había hecho lo más difícil que era aguantarle a los celestes, y buscaría alguna opción para marcar el gol de victoria. Lo buscó dominando durante toda la segunda parte, y de hecho tuvo alguna de estas ocasiones, pero no estuvieron acertados en la definición. Y las individualidades marcaron las diferencias. En la otra portería aparecería Higuaín, teniendo la primera bola franca del partido, y no lo desaprovechó. El balón acabó al fondo de la red de Padelli, que estaba dando una exhibición, y silenció el Stadio Grande Torino. El Pipita había destruido toda la estructura que había planteado el 'sabio' Ventura en el último minuto. La lió él solo. Y consiguió un gol que vale tres puntos muy importantes para la lucha final por el segundo puesto. 

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