Un partido para la historia

De un partido que esperábamos que pudiera ser el mejor del Mundial, o que al menos estuviera muy igualado pese a las importantes ausencias que sufrían los anfitriones, salió un partido que pasará a la historia por la magnitud del resultado. Y es que en el minuto 30 ya no había encuentro, y no había encuentro porque Alemania ya iba ganando 0-5. Llegaría a ser un 0-7, pero finalmente quedo en 1-7 tras el gol de Óscar, seguramente el mejor de su selección o al menos el que más lo intento, para maquillar el resultado.

Onces del encuentro (sharemytactics.com)

Desde el primer minuto Alemania mostró una superioridad sobre Brasil que se acentuaría todavía más a partir del segundo gol, obra de Miroslav Klose y con el que consigue convertirse en el máximo goleador de la historia de los Mundiales con 16 tantos en cuatro ediciones. Los de Joachim Löw ejercieron una presión alta que asfixió a Brasil, obligándole a pegar pelotazos que daban la posesión al combinado bávaro. Eso se vio reforzado cuando, en el minuto 11, Müller aprovecho un error defensivo en un corner para rematar solo en el segundo palo y batir fácilmente a Julio César. En ese momento fijo que más de algún aficionado se acordó de aquella jugada tonta en la que Thiago Silva vio la amarilla que no le permitió jugar el encuentro. Luego llegaría el carrusel de goles. En seis minutos, del 23 al 29, Julio Cesar vio como el balón lo sobrepasaba hasta en cuatro ocasiones - Klose, Kroos dos veces y Khedira -, dejando la semifinal sentenciada con todavía una hora de juego por delante.

Khedira fue el mejor jugador del encuentro.

Dentro de ese gran papel desempeñado por el combinado nacional aleman en el primera parte, Sami Khedira tuvo un papel importante. Ocupando en defensa un papel de segunda punta, encimando a Dante y Luiz Gustavo cada vez que estos tenían la pelota en la salida buscando así forzar el envio en largo o el robo en campo contrario, se acoplo a la perfección pese a que venía de tener que realizar un trabajo completamente opuesto en el encuentro anterior ante Francia, donde estuvo destinado a un juego más posicional apoyando constantemente a Schweinsteiger en la salida de balón. Haciendo ese papel de segundo punta completo un gran encuentro, su mejor encuentro en el Mundial, cumpliendo labores defensivas y teniendo un papel protagonista en ataque. Khedira no solo marco un gol, también participo en otros cuatro, sino que tuvo mucha importancia con sus constantes llegadas al área o sus apariciones en banda derecha, donde cayó en más de una ocasión, generando una superioridad con Müller y Lahm.

Otro jugador que cuajo una gran primera parte fue Toni Kroos. El jugador del Bayern de Munich, que está sonando con fuerza en las últimas semanas para el Real Madrid, fue elegido el hombre del partido. Anoto dos goles y dio una asistencia, además de deleitarnos con una clase magistral de desplazamientos en largo y en corto, controles y lectura del encuentro, como nos tiene acostumbrados. El jugador de 24 años está ganando poco a poco el reconocimiento mundial que le faltaba a un jugador de su clase, y es que esta temporada a las ordenes de Pep Guardiola ha supuesto su explosión definitiva, lo que seguramente le valdrá su fichaje por el Real Madrid.

La segunda parte fue un mero tramite. Löw aprovecho para dar descanso a algunos jugadores importantes, y su equipo bajo la intensidad en la presión. Eso permitió que Brasil comenzará a jugar más cómoda y a generar ocasiones de gol, pero en numerosas ocasiones se encontró con un inspirado Manuel Never, que está completando un Mundial formidable. Eso no impidió que Schürrle, que había entrado por Klose, hiciera un doblete poniendo el 0-7 en el marcador y deleitando al publico con un magnifico gol, el séptimo, tras una asistencia preciosa de Thomas Müller. Finalmente Brasil lograría el gol de la honra por medio de Óscar, que como ya hemos dicho fue de lo mejor de su selección, y así maquillar un resultado vergonzoso que entrará en la historia.

David Luiz salió llorando del terreno de juego.

Ahora Alemania espera rival en la final, que podrían volver a ganar 24 años después, que saldrá de la semifinal que disputan hoy Argentina y Holanda. Brasil, mientras tanto, intentará recuperarse animicamente para el partido por el tercer y cuarto puesto donde podrán darle una pequeña alegría a su país después de sufrir una humillación de este calibre.