jueves, 17 de abril de 2014

El camino de los zorros a la cima diez años después


La temporada se va acabando y las ligas empiezan a conocer a sus campeones. Muchos ya saben quién va a levantar el título que acredita como el mejor equipo del país y algunos parecen comenzar a definirse. Por otra banda, algunos también piensan en mantener la categoría un año más, pero hay quienes ya lo tienen demasiado complicado. Pero para que estos bajen, habrá otros que toquen la gloria y suban a la máxima competición nacional. Hace poco tiempo, por ejemplo, conocimos al primer equipo que jugará la Premier League la temporada que viene. Hablamos del Leicester City, que, gracias al buen papel que ha hecho durante esta temporada en la Championship, ya ha certificado su ascenso matemáticamente. Los zorros volverán a la máxima competición nacional después de más de diez años. Y hoy, en El Tiralíneas, analizaremos a fondo algunas de las claves del porqué de su ascenso.





LÍNEAS GENERALES

El equipo dibuja siempre un claro 4-4-2 durante todo el partido. Plantea la clásica línea defensiva con dos centrales fuertes y bastante cerrados, que generalmente son el capitán jamaicano Morgan y Wasilewski, y dos laterales que pueden cambiar todo el escenario del partido dependiendo de quién juegue en esa posición, ya que hay jugadores en el equipo con más y menos recorrido, pero que normalmente son el belga de Laet en la derecha y Schlupp o Konchesky en la izquierda. En esta defensa, el comodín es Morgan, que puede actuar en las cuatro demarcaciones. Por delante, se sitúan dos mediocentros bastante posicionales, que son muchas veces Drinkwater y James -aunque también puede aparecer King-, acompañados por dos interiores –Knockaert muy habitual y Dyer y Mahrez como otras opciones claras- que basculan con el equipo cuando es necesario y que pueden abrirse o cerrarse dependiendo de la situación como veremos después. Más adelantados, tenemos a dos delanteros relativamente fijos y estáticos, entre los que hay nombre como el de Nugent, Vardy, Wood y Taylor-Fletcher.



DEFENSA

La defensa del equipo tiene unas pautas bastante marcadas y van en bloque. De los dos centrales, el líder y seguramente el más completo es Morgan: es el más indiscutible en la zaga por su seguridad defensiva y buena salida de balón. Los dos saben de su función. A la hora de defender, es Wasilewski quien se muestra más agresivo y sale a presionar más para robar el balón, mientras que el jamaicano es muy conservador y se queda un poco más atrasado con el último delantero por si se supera esa línea de presión o se llega a su marca con un pase largo.

En las bandas hay un equilibrio muy importante. Mientras que el lateral derecho, el belga de Laet, es bastante defensivo, los dos que pueden jugar en la otra banda tienen bastante presencia en ataque, por lo que las ofensivas del equipo acostumbran a decantarse a la banda izquierda. Seguramente es Schlupp, quien tiene más presencia arriba, ya que no solo puede actuar como defensor sino que además también es extremo o incluso delantero centro. Por otra parte, Konchesky acostumbra a llegar solo hasta el medio del campo para ayudar a los centrocampistas, pero en todo caso siempre es más ofensivo que su homónimo en la otra banda, que es el más conservador de los tres. En el aspecto defensivo, como es lógico, se acostumbran a quedar con sus respectivos extremos cuando el otro equipo ataca rápido, y si se ataca por una banda, uno se cierra y el otro se abre, basculando a la perfección. En caso de estar el lateral volcado en ataque –generalmente el izquierdo, ya que de Laet está siempre junto a los centrales- y recibir una contra, el central hace la cobertura y se forma una línea de 3 atrás. Cuando pasa esto se puede llegar a sufrir un poco a la espalda, pero generalmente lo solventan sin muchos problemas.

Los dos mediocentros tienen una tarea parecida a la de los centrales y van turnándose tanto las labores defensivas como ofensivas, pero ahora vamos a hablar de lo primero. En transiciones defensivas lentas en las que el balón está por el centro, nos encontramos con uno de ellos mucho más agresivo que sale a presionar al poseedor, mientras que el otro se queda más atrás.

Por otra parte, los dos interiores también tienen unas tareas muy fijadas a la hora de defender: se cierran mucho cuando el balón está por el centro o ayudan al lateral de su banda si el rival ataca por allí.

Mientras tanto, al jugar con dos delanteros, uno se queda arriba estático para una posible contra y el otro se sacrifica mucho más y baja casi al nivel de los centrocampistas para presionar a la primera línea contraria. Quién hace este trabajo depende mucho de quién juegue el partido. Si juegan Vardy o Taylor-Fletcher son ellos los que apoyan en defensa, ya que se mueven más libres por el campo, mientras que si lo hacen Nugent o Wood acostumbran a quedarse los dos arriba. Si se juntan los dos –algo bastante normal, porque Nugent es titular-, hay un problema. Diríamos que el que más trabajo en defensa da es Taylor-Fletcher al poderse incluso considerar mediapunta, seguido de Vardy y después Nugent, por lo que es Wood el que se queda arriba sí o sí. Eso sí, Nugent –alrededor de quién gira el ataque- no está demasiado cómodo cuando juega con él, ya que es un delantero muy referencia y de esta manera no puede desempeñar tan bien su rol, por lo que prefiere jugar junto a los otros dos delanteros mencionados o incluso Schlupp, de quien ya hemos dicho que es muy polivalente.



En esta imagen podemos ver un resumen de todo lo que hemos hablado sobre la defensa por el medio a la perfección. Una línea de 4 atrás muy estricta cuando se trata de un ataque lento y una línea casi vertical de mediocentros en la que uno sale y el otro se queda. Estos dos están acompañados a ambos lados por los interiores, que cierran el campo cuando toca defender.



En ataques por la banda, el interior baja hasta juntarse con el lateral. La línea defensiva sigue casi igual y los mediocentros también hacen su trabajo. En este caso es siempre el del lado por donde se ataca quien sale de su posición para intentar robar. Por otra parte, en este caso el interior del otro costado no se cierra y vuelve a haber un delantero que ayuda un poco.


SALIDA DE BALÓN
Posiblemente, donde el conjunto tiene más dificultades. El no tener mediocentros especialmente buenos en la distribución del juego hace que sea muy complicado superar la primera línea de presión rival, por lo que tienen que inventar cosas diferentes para hacerlo. Una de estas posibilidades es la salida mediante Morgan. El potente central internacional con Jamaica tiene un buen control de balón y es capaz de salir con fuerza desde su posición hasta la posición de mediocentros si la presión contraria no es muy asfixiante.



Otra elección es retrasar a uno de los mediocentros hasta la línea de salida. Pese a que como hemos dicho no destacan excesivamente por su calidad técnica, sino mucho más por su disciplina táctica, sus apoyos entre el central y el lateral solventan a menudo este problema. Como veremos, en ataque el punto fuerte es la izquierda y en defensa es la derecha. Y todo a causa de las características de ambos laterales.


Pese a todo esto, las salidas no acostumbran a ser demasiado efectivas y, al tener unos delanteros tan estáticos y referencias, optan habitualmente por enviarles balones en largo y así se evitan muchos problemas.


CREACIÓN
Pese a que podemos considerarlo un equipo bastante directo que busca mucho a los dos de arriba, también pasan por fases en las que tienen que crear y lo pueden hacer con pausa si el partido lo precisa. Estos momentos en los que se fabrica el ataque, es clave el papel que hacen los interiores, principalmente. Al ser de largo los más habilidosos de los once que juegan –sean quienes sean los que actúan en cada una de las posiciones-, se permiten colaborar y ser los principales artífices de la producción ofensiva. Su trabajo se basa básicamente en las internadas y ayudas interiores a los mediocentros. Así pues, actúan muchas veces de enlace con los delanteros al meterse entre estos y los centrocampistas más posicionales. Si bien es cierto que al principio son los mediocentros los que llevan el peso de la jugada, a medida que se avanza en el campo los interiores cogen protagonismo y a partir de tres cuartos son los que dirigen con el balón en la mayoría de casos, normalmente Knockaert, que es más talentoso que el otro interior, ya sea Dyer o Mahrez. Aparte de estos dos también contamos con las ayudas de los dos laterales, especialmente el izquierdo como hemos hablado anteriormente, y muchas veces del delantero más libre, que baja a recibir un poco más atrás que el otro, más estático.




En estas dos imágenes podemos ver las dos principales fases de la creación de este equipo. En la primera, la jugada está en el principio, y son los mediocentros que dirigen. En la segunda, ya ha recibido un interior, que está muy por dentro, y se dispone a acabar la jugada ya en campo contrario.
Y para acabar esta sección, quería compartir una foto de una variación que se plantea en algunos tramos de la creación de los partidos.

En esta imagen, el dibujo provisional es un 4-2-3-1, ya que Schlupp, pese a estar de lateral, se ha colocado como extremo y Knockaert se ha colocado casi de mediapunta.


ATAQUE

Los ataques del Leicester se podrían considerar bastante variados. Si bien la alternativa más habitual es abrir a la banda e ir con muchos hombres al ataque para esperar el centro, hay otras opciones claras. Primero vamos a analizar la que es la elección más recurrente cuando el ataque es lento y no una contra muy marcada.
  
A veces, el espacio que dejan los interiores al meterse por dentro es tan obvio en los dos costados que el lateral derecho, de Laet, también se anima a subir al ataque. Con esto tenemos el centro desde el lado que podrá ser rematado por los delanteros, los interiores o incluso los mediocentros.




Por otra parte, los contraataques son algo diferentes, pero normalmente se mantiene una estructura fija al realizarlos. Lo que se intenta con ello es volcar el juego en una banda (generalmente izquierda) y acumular el máximo de hombres posibles ahí. De este modo, se pueden arrastrar varios jugadores y se deja un espacio en la otra banda para la llegada del otro interior u otro jugador que aparezca por allí. Esto puede ejecutarse muchas veces gracias a que uno de los dos delanteros se descuelga y baja un poco en la posición de mediapunta para canalizar esta ofensiva y cambiar el juego. En la imagen que presentamos a continuación lo podemos ver bastante bien.



Esta jugada acaba con el gol del interior derecho, Mahrez. Aunque no se aprecia demasiado bien, el juego viene de una acumulación en la izquierda que mantiene pendientes a todos los defensas rivales. Esto deja un espacio muy importante. La principal premisa en este caso es que los interiores se abran mucho para tener estos espacios.



CONCLUSIÓN

Y esto es, en grandes pinceladas, lo que nos ha dejado este equipo durante toda la temporada. Su buen papel en Championship le ha abierto las puertas a la Premier merecidamente, pero ahora habrá que ver como se desenvuelven en una de las mejores ligas del mundo si no la mejor. Todo dependerá de si pueden mantener a sus mejores jugadores y si podrán fichar a otros de más entidad incluso. Y entonces, su éxito estará en manos principalmente de lo acertado que esté en defensa el gran capitán Morgan, de la magia de Knockaert y de los goles de Nugent entre muchas otras cosas. Veremos cómo les sale esta aventura a los zorros de Leicester. Ilusión, desde luego, no les faltará, ya que es la primera vez desde 1999 que estarán entre los veinte mejores equipos de Inglaterra. 

*todas las imágenes están sacadas del partido contra el Sheffield Wednesday, en el que el Leicester se proclamó campeón matemáticamente*

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